«El triángulo sagrado de la cocina mexicana: El huevo, la tortilla y el pollo»
El huevo, la tortilla y el pollo son alimentos básicos en la dieta de los mexicanos, y su importancia en la economía del país es indiscutible. México es el cuarto productor mundial de huevo, con más de 2.77 millones de toneladas anuales, y es uno de los principales exportadores de este producto. En cuanto a las tortillas, su consumo per cápita es de 56.7 kilogramos anuales en el sector urbano y de 79.5 kilogramos en el medio rural. En cuanto al pollo, su consumo sigue creciendo en México, y en 2021 se experimentó una fuerte subida con respecto al año anterior.
Sin embargo, las mafias mexicanas también tienen claras estas cifras, y en muchos estados del país son ellos quienes ahora manejan su distribución y acceso. En el Estado de México, por ejemplo, la gente sabe perfectamente quiénes son los que manejan el ingreso de estos tres productos a sus municipios, pero nadie se atreve a mencionar nombres o señalar a otros. Desde que comenzó el tráfico de pollo, huevo y tortilla, las cosas se han calmado, y las balaceras y los secuestros han disminuido.
Cada vez más, las mafias se van apoderando del mercado nacional, saliendo de sus orígenes básicos, como el tráfico de sustancias tóxicas, y ahora cambiando de giro para manipular el consumo y distribución de alimentos básicos como el huevo, la tortilla y el pollo. Es necesario investigar quién está detrás de todo esto, ya que podría tratarse de políticos, gobernantes o empresarios.
En conclusión, la importancia del huevo, la tortilla y el pollo para los mexicanos es innegable, pero su distribución y acceso están siendo manipulados por mafias que buscan controlar el mercado nacional. Es necesario tomar medidas para combatir esta situación y garantizar que estos alimentos básicos estén disponibles para todos los mexicanos, sin importar quiénes estén detrás de su distribución.
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