La Secretaría de Seguridad Pública estatal (SSPH) y la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH) lograron la detención de seis presuntos delincuentes en el municipio de Tizayuca, acusados de asaltos a transportistas y narcomenudeo. Sin embargo, todavía faltan tres personas relacionadas con la banda que fue responsable del asesinato de un operador del transporte público la semana pasada.
Según el informe de la PGJEH, se realizaron cuatro cateos en los que se decomisaron dos mil sustancias ilícitas como mariguana y cristal, así como un vehículo y 12 teléfonos celulares, donde fueron aprehendidos cuatro varones, una mujer y un menor de edad.
El operativo se llevó a cabo pocos días después del asesinato de un operador de transporte público por parte de una organización delictiva conocida como «Los Hijos del Diablo». El encargado de despacho de la PGJEH, Santiago Nieto Castillo, informó que se reforzarán las labores de vigilancia en la demarcación.
El fiscal estatal interino refirió que se encuentran en un proceso de búsqueda de otros tres responsables del homicidio del chofer, quienes forman parte de la organización delictiva que opera en el Estado de México y en Tizayuca, por lo cual confió en que pronto sean detenidos los presuntos responsables de este delito.
Los presuntos delincuentes fueron acusados de ser responsables de constantes agresiones hacia los operadores de transporte público en Tizayuca, por lo cual la PGJEH abrió una carpeta de investigación para deslindar responsabilidades contra quienes han agredido a los operadores de transporte público.
El sábado pasado, la PGJEH detuvo a Gustavo «N», presunto líder del grupo criminal «Los Hijos del Diablo», quien presuntamente fue el autor material del crimen contra el transportista, lo que provocó un paro de labores de los trabajadores del volante. El servicio fue sustituido por policías estatales que manejaron las unidades públicas apoyados por patrullas de la policía estatal.
El año pasado, los transportistas de la red Tizayuca denunciaron que fueron víctimas de extorsiones y amenazas contra los prestadores de servicios sin la intervención de las autoridades federales y estatales. Además, en las últimas dos semanas, dos personas operadoras del transporte público resultaron heridas por asaltos registrados.
Por ello, los trabajadores del volante han manifestado que persiste el riesgo de que se presenten más agresiones contra los transportistas y demandaron la intervención permanente de las autoridades federales para resguardar la integridad de este gremio que ha reiterado que se encuentra en vulnerabilidad.
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