Negocios

María Antonieta Pons: El Enigma de la Rumbera Desaparecida del Cine Mexicano


El cine de rumberas en México fue un género que se desarrolló durante la Época de Oro, entre los años cuarenta y cincuenta. Sus principales estrellas fueron bailarinas cubanas, entre ellas la hermosa actriz María Antonieta Pons, quien conquistó al público con sus atrevidos movimientos, pero que misteriosamente abandonó su carrera y nunca más se dejó ver.

María Antonieta Pons nació en La Habana, Cuba el 11 de junio de 1922, pero la mayor parte de su vida profesional la hizo en México. Inició su carrera en el cine en su tierra natal, a finales de los años 30, pero fue en nuestro país donde se convirtió en una estrella del género de rumberas.

Conocida como la «primera rumbera del cine», Pons hizo su gran debut en la cinta «Siboney» de 1938. La actriz conquistó con su expresividad al bailar, y al dejarse ver como pocas artistas de la época, pues las artistas destacaban por sus llamativos trajes llenos de lentejuelas y plumas, por lo que fue una de las favoritas del género.

Su carrera en el cine fue también la más larga entre las exponentes del género de rumberas. Destacó por su participación en exitosos filmes, pero cuando vino el declive, la actriz emigró a otros géneros como la comedia, las cintas rancheras y musicales. Actuó junto a grandes figuras de la época como Pedro Armendáriz, Sara García, Germán Valdés «Tin Tan», Enrique Rambal, Blanca Estela Pavón, Manuel Dondé, Luis Aguilar y Lola Beltrán, pues su trayectoria abarca cerca de tres décadas y decenas de películas.

La rumbera sabía de su fama en la pantalla grande, pues llegó a ser considerada como la más taquillera en aquellos años, filmó más de 55 películas antes de retirarse. Tras divorciarse de Juan Orol, decidió regresar a los escenarios. María Antonieta volvió a casarse en 1950, esta vez con el actor y productor Ramón Pereda. Durante su segundo matrimonio tuvo a su única hija, María Guadalupe Pereda Pons.

Su esposo era 25 años mayor que ella y había decidido retirarse del cine a sus 68 años, en 1965. La actriz siguió sus pasos e hizo su última película, «Caña Brava», cuando tenía 43 años. En 1986, «El Ciclón del Caribe», como le llamaban a la cubana, ya no estaba activa en la pantalla grande, pero sí hacía algunas apariciones en centros nocturnos. Finalmente, cuando Pereda murió decidió no volver a mostrarse en público.

La guapa actriz y bailarina permaneció alejada de la vida pública, lo que hizo que muchos especularan con respecto a su estado de salud e imagen, pues se decía que había subido mucho de peso, cosa que fue desmentida por su último esposo, el periodista Benjamín Álvarez.

La revista Somos informó que Pons se habría rehusado a que le tomaran fotografías o dar declaraciones acerca de su vida privada. María Antonieta Pons falleció en la Ciudad de México el 20 de agosto del 2004. Según contó su viudo, había comenzado a padecer de lagunas mentales, pero fue un paro cardíaco el que terminó con su vida a los 82 años.


Source link

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba