MundoPolítica

Gustavo Petro lleva por primera vez a la izquierda a la presidencia de Colombia

El candidato del Pacto Histórico rompe con su victoria ante Rodolfo Hernández el predominio de las fuerzas políticas tradicionales

«Hoy es día de fiesta para el pueblo. Que festeje la primera victoria popular. Que tantos sufrimientos se amortigüen en la alegría que hoy inunda el corazón de la Patria». Gustavo Petro será desde el próximo 7 de agosto presidente de Colombia, el primero con un origen en la insurgencia en un país atravesado por el conflicto armado durante décadas, y también el primero de los hombres de Estado de izquierdas.

No son esas las únicas grandes novedades de este domingo: nunca antes Colombia había tenido una vicepresidenta afrodescendiente, surgida de las entrañas del dolor y la lucha: Francia Márquez. El abanderado del Pacto Histórico obtuvo el 50,51% de los votos, unas 11,3 millones de adhesiones, contra el 47,22 del magnate Rodolfo Hernández. El 2,2% del electorado sufragó en blanco. Casi el 50% de la población no fue a votar. La victoria de Petro representa un verdadero corte en la historia colombiana y pone en escena con mayor crudeza el derrumbe de las fuerzas tradicionales que se alternaron desde siempre en el manejo del Estado y el Gobierno.

El entusiasmo de la noche no estuvo reñido del sentido de realidad. Si algo sabe, más allá del sabor de la victoria, es que no podrá hacer milagros y que el país debe «producir» antes que comenzar una redistribución virtuosa. «Vamos a desarrollar el capitalismo en Colombia, no porque lo adoremos sino porque primero tenemos que superar la premodernidad, el feudalismo, los nuevos esclavismos. Tenemos que superar mentalidades atávicas ligadas al mundo de siervos que tenía como contraparte a los señores y los dueños. Tenemos que construir una democracia a partir de que exista un pluralismo de conciencias y colores. Un pluralismo económico».

Cuando se computó el 99% de los votos, Hernández, el «viejito de Tiktok», la verdadera sorpresa de estos comicios, al haber desplazado a la derecha del segundo turno, llamó a su rival y le ofreció su apoyo para que cumpla sus promesas electorales. Antes lo había llamado el presidente Iván Duque para felicitarlo. Sergio Fajardo, del centro político, le deseó al héroe de la jornada «sabiduría para tranquilizar y cuidar este país adolorido».

En su primer discurso, Petro trató de estar a la altura de las palabras de cordialidad recibidas. «No vamos a utilizar el poder en función de destruir al oponente. No habrá persecución política no jurídica. Hay que construir un gran acuerdo nacional». Para Petro, el país debe lograr que «las armas dejen de existir por fuera del Estado» en una Colombia donde, solo en los primeros meses de este año, fueron asesinados decenas de dirigentes sociales y los grupos armados, en particular el narcotráfico, volvieron a desafiar con fuerza a las autoridades. Por eso reivindicó en especial el Acuerdo de Paz que Juan Manuel Santos suscribió en 2016 con las FARC para concluir el conflicto armado, y que Duque ha mirado siempre con desconfianza. «La paz permitió que alguien como yo pueda ser presidente y que Francia sea presidenta. La paz es que nos dejemos de matar. El 7 de agosto comienza la paz integral».

Petro ganó a su vez enarbolando la bandera del cambio. Eso significa a una revisión profunda de la lógica política y económica que ha regido la vida de los colombianos. A su modo, ha tratado de capitalizar las voces que se hicieron sentir durante los dos estallidos sociales, en 2019 y 2021. No en vano, dijo en la noche bogotana sentirse deudor de la «marea juvenil y femenina», y por eso pidió la libertad de los colombianos encarcelados durante las protestas del pasado año.

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba