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«Destapan conspiración de Putin en Brasil que amenaza con desatar la Tercera Guerra Mundial»


Recientemente se dio a conocer que Rusia y Brasil tienen en común algo más que su extensión territorial: la presencia de espías rusos en su territorio. Según una investigación de la BBC, el Kremlin envió a varias personas rusas a Brasil para que se formaran como espías y se hicieran pasar por ciudadanos brasileños. Estos espías utilizan su identidad falsa para circular por espacios de poder no solo en Brasil, sino en el mundo, sin ser detectados como espías.

La BBC expuso tres casos de personas nacidas en Rusia que actuaban como espías dentro de Brasil, los cuales tenían una falsa identidad como personas originarias del país sudamericano. A través de documentos del FBI de Estados Unidos y de la Policía Federal de Brasil, se descubrió que estos espías usaron las identidades falsas en Brasil como punto de partida para llevar a cabo labores de inteligencia en países como Irlanda, Noruega y Estados Unidos.

Uno de los casos más conocidos es el de Sergey Vladimirovich Cherkasov, quien usó la identidad brasileña de Victor Muller Ferreira. Este espía fue arrestado en Ámsterdam en 2022 luego de que había sido aceptado en un programa de prácticas en la Corte Penal Internacional de La Haya. Según la investigación, Cherkasov era un agente del GRU, la ultrasecreta agencia de inteligencia militar rusa que estuvo vinculada al hackeo electoral en Estados Unidos durante la campaña de Donald Trump. Por la falsificación de documentos fue arrestado y condenado a pagar 15 años en la cárcel.

Los otros dos casos son el de Mikhail Mikushin, quien se hizo pasar por brasileño y trabajaba como investigador en la Universidad Ártica de Noruega, y el de Gerhard Daniel Campos, un espía ruso cuyo verdadero apellido es Shmyrev y que adoptó una identidad y personalidad brasileña.

Los espías rusos adoptan una nueva nacionalidad, profesión, personalidad y aficiones, e incluso crean lazos familiares y de amistad a lo largo de años. Es común que formen parejas durante su entrenamiento. El proceso de trabajar en el extranjero durante décadas de forma encubierta puede ser inmensamente estresante, por lo que tener un compañero que conozca su trabajo a menudo se considera una ventaja.

Aunque no se ha comprobado que estos espías hayan espiado a las instituciones o a alguna autoridad brasileña, su presencia en Brasil y en otros países del mundo es preocupante, ya que podría desencadenar un nuevo conflicto bélico a nivel mundial. La comunidad internacional debe estar alerta ante este tipo de acciones encubiertas de inteligencia y tomar medidas para evitar su propagación.


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